Los colegios y espacios de juego inclusivos bien diseñados dan la bienvenida a los niños y niñas de todas las capacidades a jugar, aprender y crecer juntos. Los patios escolares pueden convertirse en un verdadero espacio de reunión multigeneracional para el disfrute de la comunidad educativa, la socialización, la vida saludable y la imaginación.
Muchos colegios ya están trabajando en la verdadera inclusión dentro de sus instalaciones, con un entorno que estimule los sentidos y respetando el diseño universal que permita a los alumnos desarrollarse física, social y emocionalmente. Los patios escolares deben crear experiencias de juego que satisfagan una variedad de necesidades e intereses.
En un patio inclusivo, los alumnos y profesores de todas las capacidades pueden interactuar entre sí, y hacer lo que todos quieren hacer: jugar.
1.- Proporcione experiencias de juego multisensoriales:
Los sentidos les dan a los alumnos y alumnas información sobre el mundo que los rodea y dónde están sus cuerpos en el espacio. De esa manera, aprenden a su propio ritmo, y estas experiencias sensoriales lo ayudan a explorar su mundo y desarrollar habilidades motoras, fuerza física y funcionamiento cognitivo.
2.- Anime a todos los niños a jugar:
Los patios escolares deben proporcionar un espacio donde los alumnos de todas las edades y habilidades puedan reunirse y divertirse. Al momento de diseñar un patio de recreo inclusivo considere:
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Ofrecer una gama graduada de desafío.
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Agrupar módulos similares.
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Ofrecer juegos para todas las edades.
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Proporcionar opciones reales de juego para cada niño.
3.- Permita una completa accesibilidad:
Considere la selección del equipo correcto para que los alumnos puedan acceder a los módulos de juego. Tenga presente superficies para sillas de ruedas, muletas y diferentes rangos de movimiento.
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Prefiera una superficie unitaria protectora y amortiguadora.
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Amplias rutas de movimiento.
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Pisos suaves y uniformes dentro y fuera de la zona de juego.
4.- Aborde la integración sensorial:
Los alumnos y alumnas en el espectro del autismo o aquellos con trastornos de integración sensorial, necesitan juegos infantiles que estimulen sus sentidos sin abrumarlos. Debe considerar módulos que ofrezcan espacios acogedores y tranquilos, establezca caminos y zonas perimetrales, y proporcione un sistema de orientación de los caminos en el patio.
5.- Considere las diversas formas de juego:
Los alumnos y alumnas juegan de diferentes maneras, según su etapa de desarrollo. Algunos quieren interactuar y jugar con sus amigos, mientras que otros quieren un espacio para jugar solos o con cierta proximidad social con sus compañeros. Los módulos que escoja deben considerar el juego solitario, juego de espectador, juego paralelo, juego asociativo y juego cooperativo.
Fanheu: liderando espacios escolares
En Fahneu contamos con una amplia experiencia en el diseño, ejecución y mantención de patios en colegios de todo el país. Considerando los diversos espacios y necesidades que cada colegio vive día a día, acompañamos en el diseño asertivo de espacios que estimulen la creatividad, actividad física e inclusión de niños en todas sus dimensiones, desde módulos para niños y niñas en situación de discapacidad, pisos insitu, soluciones sombra y mobiliario complementario.